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[4.8.20] <…> Las colmenas 
abundantes eran allí, y de los panales cuantos comieron de (entre) los soldados 
todos sin sentido se volvían y vomitaban y abajo descendía para ellos y derecho 
ninguno podía mantenerse. <…> [4.8.21] Yacían así muchos como producida una 
derrota, y mucho era desánimo. Al día siguiente murió ninguno, alrededor y la 
misma aproximadamente hora volvían en sí. Al tercer día y al cuarto día se 
levantaban como de la ingesta de un brebaje. 
Jenofonte 
Anábasis  IV 8, 20-21 
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